Ven...
mis labios modulan himnos
en sonidos amartelados
que estallarán en tus oídos.
Ven...
eres la fecha predilecta,
la hora apetecida,
la noche alucinante,
la anécdota creativa. |
Tú serás la lámpara de mis deseos.
Yo seré el opio de tu sangre.
En el oleaje naufragarán
íntimos sueños errantes.
En el frenesí de la jornada
seré el vaso de tu aliento.
Y en tu piel imaginada...
escribiré mi amor
con la pluma de mis besos. |