Abrázame, como si yo fuera una almohada de plumas,
fiel consejera de tiempos difíciles,
de tiempos dichosos,
abrázame con ternura sin igual
con deseo incomparable.

Abrázame con la fuerza que te imprime
el corazón enamorado,
abrázame por última vez en este día,
deténte en el momento
y abrázame tan fuerte.

Permíteme absorber tuaroma
abrázame y permíteme que se impregne
en mi tu suave perfume
perfume de siempre
con que identificas tu presencia.

Abrázame y desboca libremente tus sentidos
que mi cuerpo sienta el latir de tu pecho,
que mi vida pueda quedar en tu vida.
Siendo uno sólo.

Abrázame tal como en una película
con ternura inocente, con infantil ternura.
Abrázame, abrázame... hasta siempre.

© 2002, Autor: Shoshan
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